La respuesta corta es: ambos. Actualmente las edificaciones se diseñan con estándares cada vez más altos en cuanto a diseño, funcionalidad y calidad, esto hace que algunos elementos se vuelvan imprescindibles. Uno ejemplo claro es el sistema canales para lluvia, el cual debe garantizar la protección que una edificación necesita contra los daños causados por la humedad y otros problemas asociados con esto. Pues al conducir el agua de lluvia desde el techo hasta la bajante  y luego transportarla para ser evacuada en un punto específico en el suelo, garantiza que no se presenten los siguientes inconvenientes:

- La lluvia cae por tu el techo hasta los cimientos de la edificación, haciendo que el suelo se expanda, luego cuando el suelo se seca se contrae, causando progresivamente daños severos en la base de la construcción.

- La humedad en las parte interna de la pared, la aparición de manchas y  olores molestos, es un problema gradual que se genera por la filtración de agua dentro de la estructura, que puede incluso acarrear enfermedades respiratorias y alergias.

- El empozamiento también atrae consigo todo tipo de insectos y plagas.

- Los costos de mantenimiento y/o reparación son muy altos y toman bastante tiempo.

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